Cardenal deplora educación sexual.
No sólo la campaña del sida cuestionó el cardenal Francisco Javier Errázuriz.
También planteó un severo reproche a los programas de educación sexual, avalados por la actual administración.
"Se opusieron a incluir la palabra 'matrimonio' cuando en ese momento se hablaba precisamente de la relación del hombre con la mujer. Es una aberración. Por lo menos desde el punto de la educación, es absurdo que se destruya el matrimonio".
Por culpa de estos *%&$&% (me reservo el comentario), tenemos altos índices de embarazos adolescentes, embarazos no deseados y contagios de diversas enfermedades... Yo tengo una magnifica relación con mi pareja, vivo con ella Y no estoy casado, así también podemos observar que en nuestra sociedad hay hombres que viven con hombres, mujeres que viven con mujeres, y eso no es ninguna aberración, es simplemente ejercer el libre derecho a vivir con quien a uno le parezca, y eso no destruye el matrimonio, simplemente lo deja como una alternativa más, igual de válida que las otras, la aberración es que estos personajes sigan manipulando de esta forma a la población.
Me pregunto yo, respecto a la moral púbica y las buenas costumbres.... Actuó de la misma forma la Iglesia para defender a la ciudadanía de los abusos cometidos por los sacerdotes en contra de niños??, no po, se hizo la weona y los escondió, o les otrogó como sanción un viaje de placer a otra localidad, es decir, vaya a abusar a los niñitos de otro país más atrasado que el nuestro. Así que... de qué moral estamos hablando, a la Iglesia le molesta que otras personas se metan en su funcionamiento, aún cuando estas sean un poder del Estado, por lo tanto debería aplicar la misma lógica y abstenerse de meter las narices en las políticas públicas.
"creo que falta mucha profundidad para tratar el tema y un respeto a lo que realmente son las opciones de la población: no se trata de leyes que obliguen a los no católicos a seguir las normas de la Iglesia, sino del respeto que tiene que haber frente a la conciencia de cada persona".
Lo que ocurre es el hecho completamente contrario, ya que una vez más la Iglesia Católica pretende imponerse como única alternativa válida, como la voz de la moralidad y como la conciencia de la ciudadanía, por lo tanto es la Iglesia, la que nuevamente nos pasa a llevar como ciudadanos, los dictámenes de la Iglesia son únicamente para sus feligreses, así que deberían vociferar sus estupideces sólo en sus iglesias, el Gobierno debe ponerse firme en este aspcto y pedirle, con mayor o menor delicadeza al cardenal, que se dedique a orientar moralmente sólo a los católicos y no pretenda ejercer ese poder en el resto de la población.
La respuesta oficial, en boca de Osvaldo Puccio fué la siguiente:
Dijo que es un programa serio asumido por el Ministerio de Educación, diseñado a partir del diálogo con la Iglesia Católica, con otras confesiones y "con personas que tienen visiones distintas a las posturas religiosas, porque el Gobierno tiene la obligación de asumir las distintas posturas y visiones de la sociedad".
Según él, el plan destaca valores superiores, como la afectividad, el amor, el encuentro. "Da cuenta que la familia tiene formas muy distintas de expresarse y el matrimonio tradicional va crecientemente siendo una de las formas y no la única".
Hay familias uniparentales o de otra naturaleza, según Puccio, y todas tienen el derecho de coexistir en la sociedad chilena.
Bien por el Estado de Chile, el problema de fondo es super serio (hablamos de la vida y la muerte de algunas personas), por lo que hay que ponerse igualmente serio y aplicar políticas que minimicen los problemas, los cuestionamientos morales son personales, no le competen al Estado, la salud pública sí.!!!!
Fuente: El Mercurio