Hoy fué el día del alumno, aunque fué más fome que el día de la Marmota... por más que intenté mantener el interés y mis orejas enchufadas a los audífonos para no escuchar el odiodo regueton, me aburrí bastante.
Lo único que salvo la jornada fué la comilona... jajaja
Me tocó cocinar (quemar más bien) varias hamburguesas, y fué entretenido ya que algunos de mis alumnos (según ellos) jamás habían comido hamburguesas y desconocían completamente el delicioso sabor del cheddar derretido sobre la carne de res...
Sin embargo Murphy se hizo presente.
No había sartén... así que ocupé unas ollas, pero la cantidad de hamburguesas me exigía una solución más amplia... así que saqué una bandeja del horno y la tire sobre los quemadores en una especie de plancha.
Y se acabó el gas...
Una estufa tenía un balón de gas (se dice balón, verdad?), pero los de la cocina estaban bajo llave, así que finalmente tuve que hacerlas al microhondas al McDonals's Style, es decir, con un aspecto de goma.
Aún así resultó todo bien, y disfrutamos de una doble ración de mierdillas.
La tarde fué larga y latera, sólo salvo el rato la música, y uno que otro paseo por el patio.
Aún así este día lleva el record, como el día del alumno más fome de toda mi vida docente.
Geraldo estuvo tratando de convencerme de asistir al recital de God Save the Queen, esos imitadores que son tan buenos que se supone que May, y la misma madre de Mercury los tienen entre sus favoritos, y, aunque me gusta Queen, aún me resisto un poco a la idea de pagar para ver una imitación, por muy buena que ésta sea.
Anda no mas, wn...